¿Por Qué No Deberías Ver Cachorros con Menos de Dos Meses en Criaderos?

En la cría responsable de perros, existen normas claras que protegen el desarrollo y la salud de los cachorros. Una de las más importantes es evitar que sean manipulados o expuestos al público antes de las 8 semanas de vida. Sin embargo, algunos criadores permiten que los futuros compradores “vayan a ver” a los cachorros mucho antes de ese momento. Aunque a primera vista pueda parecer inofensivo, esta práctica es perjudicial y demuestra una falta de profesionalismo y compromiso con el bienestar animal.

No solo los ves tú: los ven cientos de personas

Uno de los aspectos más ignorados por los compradores es que si un criador permite ver Cachorros con Menos de Dos Meses, también lo está haciendo con muchas otras personas. Eso significa que decenas o incluso cientos de familias pueden haber pasado por allí antes que tú, manipulando, tocando o simplemente respirando cerca de cachorros que aún no están vacunados ni inmunológicamente preparados para enfrentar el contacto con el mundo exterior.

Esta exposición masiva implica un riesgo real:

• Cualquier visitante puede ser portador pasivo de virus o bacterias, como el parvovirus, moquillo o coronavirus canino, que sobreviven en ropa, zapatos y manos.

• Un solo visitante puede no parecer un problema, pero la acumulación de visitas convierte el criadero en un foco de riesgo sanitario.

  
  

Un criador responsable lo sabe, y por eso restringe las visitas tempranas o las realiza bajo estrictas medidas de bioseguridad.

Razones clave para evitar el contacto antes de los dos meses

1. Sistema inmunológico débil

Los cachorros dependen de la inmunidad pasiva que les transmite su madre mediante la leche materna. Hasta que reciben su primera vacunación (habitualmente a las 6-8 semanas) y esta empieza a hacer efecto, son extremadamente vulnerables a enfermedades.

2. No están preparados emocionalmente

Durante las primeras semanas, los cachorros están en pleno desarrollo neurológico. Exponerlos al contacto con personas desconocidas, ruidos o manipulaciones constantes puede causar estrés y problemas de conducta a futuro, como miedos o ansiedad por separación.

3. Rompe el protocolo de socialización controlada

La socialización temprana debe hacerse de forma gradual y bajo control profesional. Los criadores responsables introducen estímulos nuevos, pero en un entorno seguro. La visita de múltiples personas ajenas rompe este equilibrio y puede hacer más daño que bien.

El profesionalismo de un criador se nota en lo que NO te deja hacer:

Un buen criador no solo cría bien, también protege a sus cachorros, incluso si eso significa decirte “aún no puedes venir a verlos”. Esto no es desconfianza, es responsabilidad.

Que implica permitir visitas sin control antes de los dos meses:

• Prioriza las ventas sobre la salud.

• Indica desconocimiento veterinario básico.

• Compromete el bienestar de todos los cachorros de la camada y otras camadas.

Conclusión

Si un criador te permite ver cachorros antes de los dos meses, debes preguntarte: ¿cuántas otras personas los han tocado antes que yo? Y si eso sucede, ¿quién puede garantizar que ese cachorro llegará sano a tu hogar?

Un criador serio antepone siempre la salud y estabilidad del animal sobre cualquier urgencia comercial. Ver cachorros antes de tiempo no es un privilegio, es una señal de alarma. Antes de las ocho semanas, el contacto físico debe estar completamente restringido y la única forma responsable de “verlos” es a través de fotos, videos o videollamadas con el criador. Así se protege la salud de los cachorros sin interrumpir su desarrollo ni comprometer su sistema inmunológico.

Infórmate, sé paciente, y elige siempre con conciencia. La salud y el bienestar del cachorro deben estar por encima de cualquier emoción momentánea.

Fuentes consultadas:

• Real Decreto 118/2023 (España)

• WSAVA – World Small Animal Veterinary Association

• Dr. Ian Dunbar – Etología aplicada en cachorros

• FCI – Federación Cinológica Internacional